
¿Sufres de dolor de espalda y entumecimiento en tus extremidades? Estos son los primeros signos de osteocondrosis. La movilidad insuficiente en el estilo de vida, el trabajo sedentario, la tensión en el cuello y la columna provocan desgaste del cartílago, pérdida de humedad y, como resultado, microfisuras.
La osteocondrosis cervical implica cambios degenerativos en los discos intervertebrales. No sólo se dañan los discos intervertebrales, sino también las vértebras y las articulaciones de la zona del cuello. Si la enfermedad no se trata durante un tiempo prolongado, el bienestar general del paciente empeora: dolores de cabeza constantes, aparición de fractura vertebral, deterioro de la circulación cerebral, como resultado de lo cual disminuyen las funciones cognitivas.
Razones para el desarrollo de la osteocondrosis.

Una posición sentada incorrecta, con el cuello tirado hacia adelante, conduce al desarrollo de cáncer de cuello uterino. En este caso, se crea una presión excesiva sobre los discos intervertebrales, lo que provoca cambios en los núcleos pulposos y compresión de los vasos sanguíneos. Esta es la posición que adopta una persona frente a una computadora en el trabajo. Por lo tanto, los trabajadores de oficina son los más expuestos al desarrollo de osteocondrosis de la columna cervical.
Además, las razones del desarrollo de la patología pueden ser:
- distribución incorrecta de la carga al transportar bolsas;
- lugar para dormir demasiado blando (la columna se dobla de una forma antinatural);
- predisposición genética;
- Falta de vitaminas y microelementos en la dieta;
- Trastornos del sistema endocrino;
- Curvatura de la columna y mala postura durante el crecimiento activo del cuerpo;
- lesiones a las vértebras cervicales;
- Presencia de malos hábitos.
Etapas de la enfermedad
Solo un médico experimentado, después del examen y la palpación, podrá determinar si sus síntomas de dolor son signos del desarrollo de osteocondrosis de la columna cervical y en qué etapa de desarrollo se encuentra la enfermedad. En total, la osteocondrosis cervical pasa por cuatro etapas de desarrollo:
- El núcleo pulposo, la parte central del disco intervertebral, experimenta una deshidratación moderada en la primera etapa. Como resultado, las funciones de soporte y absorción de impactos de los discos intervertebrales se van perdiendo gradualmente. En la primera etapa, el dolor se presenta con movimientos bruscos, hipotermia y permanencia prolongada en una posición.
- La segunda etapa del desarrollo se caracteriza por la aparición de congestiones y espasmos, que comprimen los capilares y vasos sanguíneos, impidiendo la circulación sanguínea normal. Esto hace que la estructura del disco intervertebral se vuelva más delgada y se cree una protuberancia (que sobresale hacia adelante o hacia atrás). Bajo la influencia de una carga excesiva, se forman osteofitos (crecimientos óseos) en las vértebras cervicales. Las sensaciones de dolor se localizan en un solo lugar; Las rotaciones e inclinaciones bruscas de la cabeza pueden provocar la dislocación de las vértebras cervicales.
- El adelgazamiento de los discos intervertebrales provoca extrusiones. El borde del núcleo pulposo atraviesa el anillo fibroso y se extiende más allá de los bordes del cuerpo vertebral. Se comprimen los músculos y las terminaciones nerviosas. El dolor se produce en el cuello, la espalda y las extremidades.
- En la cuarta etapa de la enfermedad, los discos intervertebrales se desplazan y se forman hernias centrales y laterales. Además, se forman cicatrices en los discos intervertebrales, lo que provoca la inmovilidad de la articulación afectada. El paciente experimenta dolor de espalda persistente que se irradia a otras partes del cuerpo, una sensación constante de fatiga y se producen asimetrías en las partes del cuerpo.
Síntomas de la osteocondrosis cervical.

Los síntomas de la osteocondrosis de la columna cervical se manifiestan de manera diferente según la etapa de desarrollo de la patología. En las primeras etapas prácticamente no presenta síntomas. El dolor en el cuello y la espalda solo puede ocurrir cuando permanece en una posición durante mucho tiempo, se dobla o gira bruscamente.
En etapas posteriores del desarrollo, se escucha un chirrido en la columna, el dolor de espalda se irradia a otras extremidades y se produce entumecimiento en partes del cuerpo. Cuando se forman osteofitos y extrusiones ocurre lo siguiente:
- Dolor de cabeza en la nuca y en la zona del vértice;
- Trastornos del habla y entumecimiento de la lengua;
- disminución de la sensibilidad de la piel del cuello;
- trastornos respiratorios;
- cambios en la presión arterial;
- trastornos de los latidos del corazón;
- ruido y oídos tapados;
- desmayo.
Los síntomas de la osteocondrosis de la columna cervical son mucho más pronunciados en las mujeres que en los hombres. Esto se debe a que las mujeres tienen predisposición a enfermedades vasculares y una estructura más frágil de los segmentos óseos de la columna. Los signos de la enfermedad aparecen cuando cambian los discos intervertebrales. Esto provoca una alteración de la circulación sanguínea normal y provoca fuertes dolores de cabeza, mareos y neurosis. La enfermedad suele empeorar en las mujeres durante la menopausia, cuando el cuerpo sufre cambios hormonales.
Los síntomas de la osteocondrosis cervical en los hombres son similares a los de las mujeres; La disfunción eréctil se puede observar por separado.
Los dolores de cabeza con osteocondrosis cervical son causados por una mala circulación sanguínea en el cerebro y la médula espinal. Si las vértebras están desalineadas, las arterias se comprimen y el contenido de oxígeno en la sangre disminuye. Desafortunadamente, es posible que este dolor no desaparezca incluso después de tomar analgésicos fuertes. Por tanto, es importante abordar la solución del problema de forma integral. Los mareos en la osteocondrosis cervical pueden ir acompañados de oscurecimiento de los ojos y aparición de tinnitus. Esto se debe a que los calambres musculares reducen el suministro de oxígeno al cerebro.
Es común que se produzca un nudo en la garganta con osteocondrosis de la columna cervical, así como ardor, dificultad para respirar y calambres musculares. La enfermedad provoca la compresión de las fibras nerviosas de la columna cervical en la zona de la cabeza y el cuello. Las alteraciones de los impulsos nerviosos provocan dolor de garganta.
Debido a los espasmos de los vasos sanguíneos y la irritación de las terminaciones nerviosas, se producen aumentos repentinos de la presión arterial. El aumento de la presión negativa en la osteocondrosis indica que el suministro de sangre a determinadas áreas del cerebro se ve afectado debido a que los discos intervertebrales comprimen la arteria vertebral. Como resultado, hay falta de oxígeno y aumenta la presión arterial.
¿Cómo se diagnostica la osteocondrosis de la columna cervical?

El diagnóstico de una patología comienza con la consulta de un especialista. Ante los primeros signos de osteocondrosis, consulte a un reumatólogo, neurólogo, cirujano o traumatólogo ortopédico. El médico le preguntará acerca de los síntomas y con qué frecuencia ocurren; Deberá proporcionar al especialista una historia clínica completa y los resultados de estudios previos (si los hubiere). El especialista realizará un examen visual y palpación y lo derivará para pruebas. Durante la exploración, el médico presta especial atención a la movilidad del cuello, el tono muscular y la sensibilidad de la piel, identificando las zonas más dolorosas.
Para identificar el estado de los músculos, ligamentos, vasos sanguíneos y detectar procesos inflamatorios o tumores, se prescribe un método de diagnóstico significativo y seguro: la resonancia magnética de la columna cervical. Durante una resonancia magnética de osteocondrosis, el paciente se acuesta boca arriba sobre una mesa deslizante especial. Para aliviar la tensión muscular, se colocan rodillos sobre la cabeza del paciente y se aseguran las extremidades con correas. Cualquier ligero movimiento durante el procedimiento puede afectar la calidad del resultado. Luego, la mesa pasa al área de tomografía. El procedimiento no causa ningún dolor. El tomógrafo hace mucho ruido al escanear, por lo que puedes utilizar auriculares para evitar molestias.
Si la resonancia magnética está contraindicada, existen otros métodos de diagnóstico como la tomografía computarizada y la radiografía. Las radiografías sólo son adecuadas para el diagnóstico primario y no proporcionan una imagen capa por capa del tejido afectado. Sin embargo, este estudio es el más sencillo y económico y permite examinar el cuerpo del paciente en varias proyecciones. Debido a los altos niveles de radiación del cuerpo, las radiografías no se pueden realizar con frecuencia.
Una tomografía computarizada implica realizar una exploración utilizando uno o más haces de radiación ionizante. Pasan por el cuerpo humano y son detectados por detectores. Los detectores se mueven en direcciones opuestas a lo largo del cuerpo del paciente y registran hasta 6 millones de señales. La imagen muestra tejido de diferentes densidades con una definición precisa de los límites de los órganos y las zonas afectadas en forma de sección. Este procedimiento le permite obtener una imagen capa por capa.
Tratamiento de la osteocondrosis de la columna cervical.

La forma de tratar la osteocondrosis cervical la determina únicamente un médico después de un examen, un estudio del historial médico y la obtención de los resultados del diagnóstico de hardware. Si la enfermedad se diagnosticó en una etapa temprana, el tratamiento se realiza mediante métodos conservadores. En el tratamiento de la osteocondrosis, es importante adoptar un enfoque integrado: tomar medicamentos, realizar fisioterapia, realizar masajes terapéuticos y evitar la actividad física intensa.
Primero, necesitas aliviar el dolor. Para ello, se prescriben analgésicos y analgésicos tópicos. Se prescribe un collar ortopédico para los espasmos musculares graves. Después de eliminar el síndrome de dolor, es necesario detener el proceso inflamatorio y restablecer la circulación sanguínea normal. Para ello se realiza una terapia antioxidante y antiinflamatoria. Como medidas adicionales se prescriben ejercicios terapéuticos y natación. Puedes realizar ejercicios físicos tanto en casa como con un entrenador.
Si la osteocondrosis se ha vuelto grave, el médico puede prescribir una cirugía. En casos raros, se recurre a la cirugía cuando la patología se desarrolla en el contexto de otras enfermedades: escoliosis, hernia de disco, curvatura o desplazamiento de la columna, lesiones.
El tratamiento de la osteocondrosis cervical en mujeres no es muy diferente del tratamiento en hombres. Sin embargo, los médicos suelen recomendar a las mujeres compresas externas para calentar y fortalecer los músculos del cuello.
Los expertos recomiendan prevenir diversas enfermedades de la espalda en la primera infancia. Para hacer esto, debe mantener la postura correcta al caminar y sentarse en su escritorio. Una buena nutrición y un fortalecimiento adecuado de los músculos de la espalda te ayudarán a evitar consecuencias negativas en el futuro.
























